A la hora de planear y/o diseñar un hospital, o bien de ampliarlo o remodelarlo, no se puede decir que haya aspectos sin importancia o que tengan muy poca. En el caso de las redes de gases de uso médico es necesario tener en cuenta algunas consideraciones.
Desde el momento en que se trata de lugares a los cuales se acude en busca de atención para el cuidado de la salud, todos los aspectos son importantes. Antiguamente se consideraba que lo necesario era que hubiera espacio suficiente y algunas condiciones de higiene, y poco importaba si el lugar era acogedor o lúgubre pues se trataba de un hospital, no de un hotel de lujo.
El concepto de hospital ha ido evolucionando poco a poco.Hoy en día se toman en cuenta muchísimos factores para que se ofrezcan las condiciones de funcionalidad, seguridad y dentro de lo posible, que se brinde un ambiente donde se propicie el buen estado anímico de los pacientes.
Entre los múltiples recursos y facilidades con que debe contar un hospital es la red de distribución de gases de uso médico, que se puede decir que es un factor vital para el funcionamiento del hospital sin que con ello se reste importancia a otros aspectos. Para su diseño, instalación y funcionamiento existe una normativa oficial vigente a la que es necesario apegarse estrictamente. En esta normativa, que es específica de cada país, se contemplan absolutamente todos los aspectos que intervienen en dichas redes, como es el diseño, especificaciones de los materiales y componentes, y muchos otros factores más.
A continuación se ofrecen algunas generalidades que pueden ser de gran utilidad para la integración de cualquier proyecto que involucre redes de distribución de gases de uso médico.
Importancia del diseño
Desde el momento en que los sistemas de gases medicinales tiene entre sus principales finalidades el dar soporte a la vida de los pacientes, no se puede descuidar ningún aspecto, desde que el proyecto inicia, en las etapas de planeación y diseño, así como a todo lo largo de su construcción, instalación y operación, incluyendo después los diferentes tipos de suministros que se puedan requerir.
Entre los primeros puntos a establecer destacan los siguientes:
- Factores determinantes para el diseño de la red.
- Contar con un equipo de especialistas en diseño.
- Disponer de los planos arquitectónicos.
- Tener bien definidas las necesidades clínicas propias de la institución.
- Establecer cantidades y ubicaciones de las tomas para los diferentes tipos de gases de uso médico.
- Establecer los niveles de flujos, caudales, presiones, etc., que se van a requerir.
- Tener bien definido todo lo que se refiere a suministros y requerimientos para ello.
- Tomar todas las consideraciones necesarias de seguridad y funcionalidad para establecer el área de almacenamiento, generadores, etc.
- Considerar y supervisar periódicamente que tuberías y demás materiales reúnan las características y especificaciones para el uso que van a tener.
- Garantizar revisiones y mantenimientos periódicos y regulares para la red y sus diferentes componentes, así como su disponibilidad inmediata en caso de necesidad.
Diseño
Obviamente no es lo mismo diseñar una red de distribución de gases para un hospital de nueva edificación que para uno en remodelación o para alguna ampliación. Son tres circunstancias muy diferentes entre sí y para las cuales se deberán tomar consideraciones distintas. En algunos casos, sobre todo en remodelaciones y ampliaciones algunas veces es posible hacer algunas adaptaciones, pero en otros, lo recomendable será tal vez construir una nueva red.
Equipo de diseño
Integrar inteligentemente al equipo de diseño es fundamental para la realización de cualquier proyecto. Lo recomendable es que esté formado por director, planificador, ingeniero biomédico, arquitecto, consultores y otros especialistas, según necesidades específicas de cada institución.
Planos arquitectónicos
Es básico el que el equipo de diseño disponga de los planos actualizados de la edificación, de manera que pueda apegarse a características y especificaciones de las normativas, así como a las necesidades del hospital.
El diseño de la red es fundamental para que caudales, presiones, y demás factores de suministro para las diferentes áreas no se vean afectadas, poniendo en peligro la vida de los pacientes y del personal.
El número de tomas y el caudal se regula en proporción al número de camas, habitaciones, quirófanos, etc.
Ubicación de las fuentes y almacenamiento de los gases
Así se trate de un hospital de diseño horizontal o vertical, o una combinación, es necesario detenerse y evaluar la ubicación de las fuentes principales de suministro de los diferentes gases de uso médico, tanto por eficiencia como por seguridad.
Sistema de distribución
Básicamente un sistema de distribución de gases de uso médico consta de:
- Manifold
- Tuberías
- Controles y/o válvulas
- Salidas y/o terminales
- Alarmas
En lo que a tuberías se refiere se subdividen en:
- Línea principal. Parte directamente de la fuente hacia los ramales.
- También se conocen como “raisers” y son tuberías verticales que conectan las líneas principales con los ramales.
- También se les llama líneas laterales y llevan los gases hacia áreas más pequeñas.
válvulas y alarmas
Este tema es sumamente delicado ya que se refiere a la seguridad. Son elementos que deben estar siempre en óptimo funcionamiento, y aunque, en el caso de las alarmas, deben estar visibles y audibles, no deben ofrecer ninguna posibilidad de ser manipulados por nadie exceptuando a quien está a cargo.