Primero que nada es necesario aclarar que para uso en clínicas y hospitales es necesarios que tanto compresores como bombas de vacío sean de grado médico, ya sea que se utilicen en veterinaria, odontología o para cualquier otra especialidad médica.
Un compresor es una máquina que como su nombre indica, tiene la capacidad de succionar aire ambiental y comprimirlo para después expulsarlo nuevamente pero a presión.
Para poder ostentar el calificativo de “Grado Médico”, el compresor debe contar con filtros especiales para que el aire almacenado esté libre de partículas de polvo y otras impurezas. El aire succionado pasa por los filtros y ya limpio se almacena en una cámara a una presión superior. Este aire tiene diversos usos médicos.
Tanto compresores como bombas de vacío deben ofrecer las características tales de calidad, seguridad y eficiencia para no poner en riesgo la salud de los pacientes.
Tipos de compresores
En la actualidad existen diferentes tipos de compresores pero en realidad su trabajo es el mismo y consiste, como ya dijimos, en succionar aire de la atmósfera, filtrarlo en el caso de los compresores de grado médico, y regresarlo para una utilización específica.
Los compresores se clasifican en varios tipos según su funcionamiento. De acuerdo a esto los hay de:
- Desplazamiento positivo. Estos compresores tienen un flujo intermitente de toma de gas. Conforme se toma el aire, pasa a una cámara más pequeña, donde al aumentar la presión el aire se comprime. Este tipo de compresor a su vez tiene dos clasificaciones diferentes que se explican más adelante:
- Reciprocantes
- Rotativos
- Dinámicos. Se trata de máquinas de funcionamiento rotatorio que tienen un flujo continuo.
En términos generales las máquinas requieren de aceite, lo que en cuestión de compresores de uso médico es un factor determinante para la elección del indicado para cada uso específico. El aire medicinal debe ser de calidad tal que no contenga ningún tipo de impurezas, es decir, tampoco debe contener el más mínimo rastro de aceite. Este punto es vital por lo que al momento de elegir un compresor debe seleccionarse aquel que sea libre de aceite.
Entre los tipos de compresores de grado médico de mayor utilización destacan los siguientes.
- También se conocen como alternativos. Este tipo de compresores utilizan pistones, es decir, bloque-cilindro-émbolo como en cualquier sistema de motor de combustión interna. Cuentan con válvulas que abren y cierran, que es lo que con el movimiento del pistón succiona y comprime el aire. Este tipo de compresor es muy utilizado cuando se requieren potencias pequeñas, independientemente del volumen que se requiera. Los hay herméticos, semiherméticos y abiertos. En el caso de los pequeños, vienen sellados de fábrica y no es posible abrirlos para su mantenimiento o reparación, al contrario de los semiherméticos y abiertos, que sí lo permiten y en los que incluso en ocasiones se recomienda una cierta rutina de mantenimiento.
- Los compresores rotativos los hay de paletas y helicoidales:
- De paletas. Este tipo de aparatos cuenta con una carcasa, un rotor con estrías radiales y una o varias palas cuyos extremos se ajustan al cuerpo interior del aparato produciendo así la compresión.
- El trabajo de compresión de este tipo de aparatos se realiza de manera continua al hacer pasar el aire o gas entre dos tornillos giratorios. Este tipo de compresor es de muy alto rendimiento y un sistema de regulación sencillo. Pero debido a su complejidad mecánica y a otros factores específicos resulta un tanto costoso por lo que generalmente se elige cuando se requieren potencias sumamente elevadas.
Además de un aire puro, sin partículas y totalmente libre de aceite se requiere que el aire para uso médico debe ser seco por lo que el equipo debe contar con un sistema especial de secado. Esto es importante para evitar la formación de gotas de agua dentro de los ductos, pero debe cuidarse de no secarlo a un nivel inferior a ese punto sería un desperdicio de recursos ya que habría que humidificarlo para ser inhalado sin perjuicio de la salud de los pacientes.
Volúmenes, capacidades y dimensiones de un compresor
Por lo regular las características de un compresor se miden en cuanto a:
- Potencia en HP
- Volumen de aire en PCM (Pies Cúbicos por Minuto)
- Presión de Aire en PSI
- Capacidad del tanque en litros.
Entre las múltiples opciones de equipos de compresión que existen los hay con hay diferentes tipos de indicadores, tanto analógicos como digitales así como con distintos tipos de alarmas.
Para determinar las especificaciones de compresor que se necesita es recomendable establecer ciertos puntos básicos como:
- ¿Qué uso se le va a dar al compresor?
- En términos de HP, ¿qué necesidades se tienen?
- Determinar qué voltaje se maneja.
- ¿Cuáles son las necesidades en cuanto a la presión (PSI)?
- Determinar las necesidades en cuanto a capacidad del tanque.
- Tener bien definida la posible ubicación del equipo.
- Tener claras las condiciones climáticas de la región.
En términos generales no se puede hablar de marcas o modelos determinados de equipo de compresión de aire ya que de alguna manera todos ofrecen ventajas y algunas desventajas. Aquí lo importante es tener presente un panorama general de las necesidades y presupuesto que se tiene, y consultarlo con asesores especializados para que la elección sea la más acertada.
interesante saber para y como funciona un equipo grado hospitalario.