Los rápidos avances que surgen cada día en cuanto a la tecnología de los equipos y los recientes cambios en el negocio de la atención de la salud han creado la necesidad de evaluar la funcionalidad de los laboratorios existentes.
En muchos casos, los laboratorios deben ser rediseñados para adaptarse a todos estos nuevos cambios y la incorporación de nuevas tecnologías puede alterar de manera considerable las exigencias del entorno de trabajo del laboratorio.
Gracias a una mayor fiabilidad y sofisticación en los sistemas de diseño, la construcción de un nuevo laboratorio requiere menos supervisión por parte del personal que labora dentro de él para la construcción del mismo.
Los laboratorios a menudo deben ser rediseñados para proporcionar a los trabajadores un espacio para practicar habilidades de trabajo intensivo, y al mismo para brindarles la seguridad necesaria cuando trabajan en el lugar.
Los proyectistas e ingenieros que participan en el diseño y en la construcción de un laboratorio sienten de hecho una gran preocupación y responsabilidad por la gran cantidad de códigos de construcción y seguridad que el diseño final debe satisfacer.
El laboratorio terminado debe cumplir con una gran cantidad de códigos federales, estatales, municipales y de la industria para garantizar de esta manera un lugar completamente seguro donde se pueda trabajar.
Lograr entender adecuadamente el camino del cumplimiento de estos códigos de seguridad, de salud y de construcción, que en ocasiones puede ser contradictorios, requiere experiencia y coordinación de equipo.
Consideraciones mecánicas
Cuando los arquitectos y los ingenieros eléctricos inicial el plan de diseño de un laboratorio, existen dos consideraciones mecánicas de suma importancia que deben de ser tomadas en cuenta para brindar seguridad y evitar posibles accidentes en el futuro.
Sistema Eléctrico
A pesar de que el personal que labora dentro de un laboratorio utiliza de forma constante la electricidad, tanto dentro como fuera del laboratorio, su uso indebido puede llegar a ocasionar una serie de importantes daños físicos o incluso, la muerte.
Es por esta razón, que una de las principales consideraciones que deben de ser tomadas en cuenta cuando se inicia con el diseño y la construcción de un laboratorio es la parte eléctrica.
El laboratorio tiene dentro de sus instalaciones diferentes tipos de piezas y equipos, que demandan grandes cantidades de corriente eléctrica.
Estos, incluyen congeladores, armarios de bioseguridad, centrifugadoras e incubadoras.
El diseño de la sala por lo tanto, debe de realizarse tomando en cuenta aspectos importantes tales como la demanda eléctrica antes de su ocupación para evitar un posible fallo de energía.
Todo el cableado eléctrico y la construcción debe cumplir con las prácticas de seguridad estándar.
La práctica de seguridad mínima debe ajustarse a las regulaciones codificadas y los equipos de alto voltaje deben ser etiquetados de forma adecuada para indicar: Peligro y la presencia de Alto Voltaje.
Los interruptores para apagar toda la energía eléctrica del equipo en caso de emergencia deben estar etiquetados de forma prominente.
En cuanto al sistema eléctrico que se debe de tener en el laboratorio también resulta fundamental el pensar en la instalación de un sistema de electricidad para casos de emergencia.
Si se sospecha que existe un peligro eléctrico dentro del laboratorio, este dispositivo debe de desconectarse inmediatamente y la causa debe ser determinada por una persona competente en la materia, nunca por el personal que labora dentro del laboratorio.
Tuberías
Este es considerado uno de los aspectos mecánicos más importantes en la construcción y el diseño de un laboratorio clínico.
El punto más importante antes de su edificación, es el aprender qué tipos de operaciones y/o experimentos se llevarán a cabo en el lugar y cómo se utilizarán y eliminarán productos químicos.
Los productos químicos deben ser conocidos para especificar la correcta manera de tratar los residuos ácidos pues éstos tienen la capacidad de dañar los materiales de las tuberías de ventilación, ya que muchos de los productos son corrosivos y se puede ocasionar graves daños dentro del laboratorio si no son eliminados de manera correcta.
Es importante recordar que las válvulas auxiliares para las líneas de gas y de vacío deben estar situadas fuera del laboratorio, principalmente porque en caso de emergencia, el laboratorio puede ser un lugar inseguro para entrar.
Por lo tanto, las válvulas de las líneas de gas y de vacío deben estar situadas fuera del laboratorio.
También, lo ideal es utilizar conexiones que sean flexibles para conectar el gas y otros servicios de fontanería a cualquier dispositivo autónomo, incluidos, entre otros, los armarios de bioseguridad, las incubadoras y los congeladores de nitrógeno líquido.
Las conexiones flexibles deben ser apropiadas para los requisitos de presión y deben estar construidas con material compatible con el gas que transporte. Una válvula de cierre debe estar ubicada a la vista de la conexión y claramente marcada.
Las líneas de aguas residuales de los laboratorios deberán siempre estar separadas de las aguas residuales del resto de la instalación hospitalaria, en caso de que el laboratorio se construya en este lugar, y se instalará un punto de muestreo en un lugar de fácil acceso fuera del edificio.
Fuentes:
labmanager.com
ehs.stanford.edu