La medicina regenerativa tiene como objetivo estimular o regenerar células, órganos y tejidos y así restaurar las funciones normales de los mismos.
Dicha medicina ha tenido un gran avance en la última década, siendo las investigaciones en laboratorios de investigación de células madres las que más resultados han generado.
Inclusive experimentos en animales han sido muy exitosos para tratar diversas enfermedades como la destrucción neuronal, infartos, cáncer y diabetes del tipo 1.
Uso de las células madres en pro de alcanzar la cura contra el Parkinson
La ultima investigación que ha dado mucho de qué hablar, fue dirigida desde la universidad de Kioto ubicada en Japón donde se obtuvieron resultados favorables en la utilización de células madres reprogramadas de origen humano (células iPS) en una terapia para la cura del Parkinson en macacos.

Uso de células madres para lograr la cura contra el Parkinson
Es la primera vez que dichas células se muestran seguras y eficientes para el tratamiento del párkinson en primates y dan pie para un posible ensayo en personas.
El trabajo fue publicado en Nature (prestigiosa revista científica a nivel mundial) en agosto de este año.
EL Parkinson consiste en la muerte de neuronas en los ganglios basales ubicados en el cerebro.
Los ganglios basales son la estructura encargada de controlar los movimientos voluntarios y otras funciones.
Es contraída mayormente por personas mayores de 60 años, quienes presentan pérdida de control de sus movimientos y podrían llegar a desarrollar demencia y alteraciones en su forma de actuar.
EL párkinson es, después del Alzhéimer, la segunda enfermedad neurodegenerativa más común.
Y aunque existen tratamientos donde se puede frenar el avance drástico de los síntomas, entre otras cosas, no se ha encontrado una cura completa.
A causa de esta enfermedad, en la mayoría de los pacientes se presenta la muerte de un tipo de neuronas que secretan dopamina.
Por ello, médicos experimentados han intentado frenar la enfermedad, restaurando la función de la dopamina, suministrando un precursor del neurotransmisor, pero según “las terapias convencionales no pueden controlar los síntomas del párkinson.
Las neuronas dopaminérgicas van menguando más y más a medida que progresa la enfermedad”, explica Jun Takahashi, investigador de la Universidad de Kioto y director de la nueva investigación con células madre.
Primeros pasos de Jun Takahashi para la cura del Parkinson
Takahashi junto a su equipo mediante sus experimentos quieren proporcionar en los pacientes, nuevas neuronas dopaminérgicas que contrarresten la enfermedad.
Y como no es una buena opción trasplantar neuronas de una persona a otras, las han tenido que generar a partir de células de la piel y sangre de donantes voluntarios.
Dichas células fueron sometidas en los laboratorios de investigación de células madres a un coctel molecular y así hacerlas rebobinar y transformarlas en células madres pluripotentes (células embrionarias), capaces de regenerar cualquier tejido.
Luego las cultivaron hasta convertirlas en neuronas dopaminérgicas, que trasplantaron al cerebro de 11 macacos con síntomas de párkinson.
Un año después, estos primates presentaron mejoras para controlar su movilidad.
Al año siguiente ya terminado el estudio tuvieron que sacrificar a los animales, pero pudieron concluir que las neuronas reprogramadas habían sido implantadas con éxito en el cerebro de los animales y sobrevivido hasta entonces.
El trasplante de células reprogramadas podría tener un efecto similar a la L-DOPA, fármaco más usado por los pacientes con párkinson.
Otros resultados impulsan la prueba en humanos
Gracias a que el tratamiento fue efectivo, no se encontraron tumores ni patologías en las células y el hecho de que no hubo efectos adversos en los primates se hace posible que el siguiente paso sea probar el tratamiento en humanos, ya que según palabras de Jun Takahashi
“El protocolo experimental es prácticamente igual al de un ensayo clínico para pacientes con párkinson, por lo que se puede considerar una simulación de tal”
Takahashi junto a su grupo, han intentado generar las células madre directamente de la piel y sangre de el propio receptor del tratamiento y así no fuese necesario buscar donantes compatibles, pero lamentablemente relatan que no es una opción factible ya que generaría un elevado costo, inversión de tiempo y trabajo, así que han concluido que esta posibilidad no es realista por ahora.
El investigador japonés se propone comenzar con un ensayo clínico junto con su equipo, para aplicarlos en pacientes humanos a finales del 2018, donde al igual que la investigación con los primates, buscaran obtener células madre pluripotentes de donantes voluntarios compatibles con los receptores.
Buenas críticas por parte de María Josep Marti
La neuróloga María J. Marti, del Hospital Clínic de Barcelona, que no ha participado en el estudio, pero que quedó fascinada cuando lo leyó expresa que
“los primates son mucho más cercanos a los humanos que, por ejemplo, los ratones”
dando a entender que al experimentar con estos animales que poseen muchas características similares a los humanos la implementación en los pacientes que padecen de párkinson es una posibilidad muy cercana.
También señala que “es un avance importante”, y valora que, aunque todavía está en su fase inicial, es un proyecto “realmente novedoso” y que es necesario el apoyo de la comunidad científica.
Con el avance de la investigación es muy probable que a la vuelta de dos o tres años, se pueda dar la noticia de que se ha encontrado la forma de erradicar el párkinson en su totalidad.