La mayor parte de los procesos médicos, de laboratorio y de diagnóstico que se realizan dentro de un centro hospitalario necesitan de los gases medicinales para poder cumplir su función de manera adecuada.
Esto nos indica la necesidad que tiene el centro hospitalario y el personal de contar con adecuado sistema de gases que garantice una adecuada salud a todos los pacientes que ingresan al hospital.
Debido a la importancia que tiene el uso de los gases medicinales es imprescindible el poder contar con una serie de herramientas para garantizar una adecuada gestión de los mismos.
Es también muy importante, contar con las pruebas necesarias para comprobar que estos sistemas de gases medicinales funcionan de la manera correcta, contando siempre con los mecanismos necesarios para evitar emergencias, para que sean almacenados de forma correcta y para que la distribución de los mismos se haga de forma uniforme y segura.
4 de las pruebas mayormente realizadas para comprobar la buena función del sistema de gases
Realizar análisis de la pureza de los gases medicinales
Los gases medicinales viajan largas distancias hasta llegar a los diferentes puntos en donde serán utilizados es por esta razón, el probar la calidad de este gas que luego será inhalado por el paciente es de suma importancia.
Los controles analíticos son los indicados para realizar este análisis. Para realizar estos estudios también se debe tener en cuenta la necesidad de contar con áreas adecuadas de almacenamiento de cilindros protegidas contra un posible deterioro, el oxígeno medicinal debe de poder ser obtenido por medio de la licuefacción del aire, deben existir circuitos cerrados y construidos únicamente para el aire medicinal.
Realizar de forma periódica las respectivas pruebas de presión hidrostática
Este es un procedimiento que debe de ser realizado únicamente por el personal altamente calificado.
Los cilindros en los que se guardan los gases pueden llegar a tener una vida útil bastante larga dependiendo de la forma en la que haya sido tratado y manipulado por el persona, es por esta razón, que para poder comprobar la salud de los gases es necesario controlar también la presión hidrostática que estos cilindros poseen.
Lo ideal es realizar este tipo de prueba cada 5 años, y si el cilindro pasa la prueba con números positivos, podrá ser utilizados durante 5 años más, caso contrario debe de eliminarse del lugar. En este aspecto también es importante que el equipo técnico realice una serie de ensayos de presión hidrostática, los cuales son realizados con el objetivo de aumentar la seguridad y así poder garantizar que los cilindros o tanques que contienen los gases medicinales son aptos para poder soportar las altas presiones a las que por lo general son sometidos.
Revisión de las conexiones entre las válvulas y los reguladores
Generalmente, los cilindros de gases traen consigo una válvula.
Para regular y probar el paso del gas, las válvulas deben de estar correctamente graduadas y colocadas con el objetivo de brindar seguridad.
Estas válvulas y reguladores deben de ser revisados antes de que sean colocados al cilindro en busca de que las conexiones empaten de forma adecuada, caso contrario, estaría indicando una mal uso o el uso de un regulador erróneo.
Para revisarlos, el técnico debe de conectar el regulador a la válvula, colocarse al lado del regulador antes de abrirla y vigilar que el asiento de seguridad no brinque cuando se abre el cilindro, de ser así, estaría indicando que la presión del gas es demasiada elevada lo que podría llegar a producir un incendio.
Cuando se verifican los reguladores de forma constante será más fácil detectar los diferentes problemas mecánicos que pueden presentarse antes de que el daño sea aún más grave.
Si cuando el técnico revisa el regulador y la aguja del medido de baja presión aumenta mientras el flujo descendente se encuentra cerrado, sabrá que el regulador está seriamente dañado.
Revisión de fugas de gases
Este es un aspecto muy importante y una prueba que debe hacerse en los equipos de forma constante.
La mejor opción es colocar agua con jabón en cada una de las válvulas, uniones y en las partes externas del regulador con el objetivo de buscar burbujas.
Cuando se presentan estas burbujas, se sabe con certeza que en el cilindro existe una fuga que debe der ser reparada de inmediato.
Otro aspecto para la revisión de fugas de gases es el de oler el gas, si se presenta un olor característico del gas que tiene el cilindro, el equipo debe de ser apagado y desconectado de inmediato y proceder a buscar el lugar de la fuga.
Cabe mencionar que este proceso debe de ser realizado únicamente por profesionales de seguridad y técnicos especializados, si el personal encuentra una fuga, debe de reportarla de inmediato y detener el uso del cilindro.
Los técnicos y el personal encargado deberán limpiar y reparar todo tipo de fugas de gases medicinales que puedan presentarse en un centro hospitalario, será el equipo quien cumpla con la función de abrir las conexiones necesarias y de sellar las superficies que necesitan ser reparadas para garantizar la seguridad de todas las personas que están en contacto con los gases.