El equipo de farmacia del Hospital Markham Stouffville, ubicado en Canadá, recuerda al primer paciente cuya pulsera de identificación incluyó un código de barras.
Ese código de barras habilitó el “BoxPicker”, que es un sistema de última generación que sirve para el almacenamiento y suministro automatizado de medicamentos, con el cual se puede ubicar la medicación que se ordenó para el paciente.
Los códigos de barras facilitan los procesos
«Nuestro primer paciente estaba muy emocionado, al igual que nuestro equipo de trabajo», dice Karen McFarlane, farmacéutica de la institución. «Es genial ver a nuestros pacientes conscientes de la seguridad y del papel que la tecnología juega en la entrega de medicamentos», continuó.
La innovadora tecnología fue incorporada a la nueva farmacia como parte del proyecto de expansión y renovación de este hospital. De hecho, ahora parte de una selecta lista de equipos para hospitales.

Cómo los códigos de barra apoyan la gestión de medicamentos
«Cuando se diseñó el nuevo espacio de la farmacia, pudimos añadir esta tecnología desde el principio, esta es una gran ventaja para el equipo, usted puede diseñar el
proceso y la forma en la que trabajará en su lugar de trabajo, sabiendo que una tecnología como el BoxPicker estará allí para ayudarlo «, dice Barbara Steed, Vicepresidenta Ejecutiva de Programas Clínicos y Jefe Ejecutivo de Enfermería del Hospital Markham Stouffville.
El Swisslog BoxPicker tiene un sistema de brazos articulados robótico que se mueve hacia arriba y hacia abajo en los pasillos del área de farmacia, en un espacio donde más de 1,000 medicamentos se almacenan en cajas blancas, en dosis adecuadas, cada uno tiene su propio código de barras.
El brazo mecánico se desliza hacia arriba y hacia abajo, hacia adelante y hacia atrás a lo largo del espacio de recolección de medicamentos, una vez que el personal de la farmacia le ha pedido que encuentre uno en especifico.
Con esta nueva tecnología de última generación, los pacientes reciben los medicamentos que han sido verificados por los códigos de barras, todo esto para mejorar la seguridad del paciente y evitar una medicación errónea.
El modelo de tecnología de código de barras en la administración de los medicamentos, requiere de unos pasos a seguir con la intención de obtener la dosis correcta y la medicación adecuada para el paciente adecuado y en el momento adecuado.
Solicitar y seleccionar medicamentos
Cuando un médico ordena un medicamento para un paciente, la orden es escaneada a la farmacia.
A continuación, el farmacéutico revisará la orden para confirmar, la dosis correcta, la frecuencia y las alergias a las que es vulnerable el paciente.
El pedido se envía al BoxPicker, que cuenta con un 100% de precisión en su funcionamiento.
Confirmar la medicación
El técnico de farmacia confirma que el medicamento seleccionado es correcto usando un escáner de código de barras, que le permite saber que dicho código coincide con la orden.
Luego de este paso de confirmación, el medicamento se envía de inmediato a la unidad de enfermería utilizando el sistema de tubos neumáticos que conecta la farmacia a todas las áreas de atención al paciente.
Administración de los medicamentos
Al ingresar al hospital, a cada paciente se le da un brazalete que contiene un código de barras único y específico para cada uno de ellos.
Este código de barras es verificado por las enfermeras o técnicos cada vez que se administra un medicamento o se realiza un tratamiento.
Una vez que se verifica el brazalete, la enfermera puede utilizar el EMAR (registro electrónico de medicamentos) de los pacientes para escanear la medicación correspondiente antes de administrar el medicamento.
Si la enfermera examina la medicación y surge un medicamento que no está permitido para el paciente, el EMAR alertará a la enfermera, y por tanto, evitará que se produzca una medicación errónea.
Dado que los medicamentos pueden necesitar ser administrados en horas en que la farmacia está cerrada, esta posee una tecnología llamada Unidades de Dispensación Automatizadas (ADU), que sirven para dispensar medicamentos urgentes para los pacientes.
Esta tecnología utiliza la verificación de huellas dactilares para acceder a la máquina y extraer el medicamento adecuado para el paciente sobre la base de lo que se ordenó para este.
Las enfermeras aprecian este sistema ya que permite un acceso más fácil a la medicación en horas en las que ellas no se encuentran.
«La tecnología es un gran paso para mejorar la seguridad del paciente», dice Steed, «El equipo de farmacia, nuestras enfermeras y nuestros médicos se benefician de esta tecnología, ya que reduce el error humano ya que son capaces de asegurarse de que el medicamento correcto sea administrado al paciente, en última instancia, se trata de nuestros pacientes, su seguridad y la calidad de la atención que les estamos brindando», admite Steed.
Mediante el uso de códigos de barras en los medicamentos y con un proceso estándar de verificación de medicación, el hospital es capaz de realizarlo de manera rápida, precisa y reduciendo el error humano.
«Como una enfermera que utiliza este sistema todos los días, hace mi trabajo más fácil y hace a mis pacientes más seguros», dice María Dimacuha, enfermera quirúrgica.
«Soy capaz de trabajar con esta tecnología y asegurarme de que mis pacientes están recibiendo la medicación que necesitan para ayudarlos a mejorar, esto genera apego hacia la tecnología y un cariño por los pacientes muy grande», concluye.