Para casi cualquier persona el estar en un hospital es una experiencia abrumadora y generadora de graves estados de ansiedad, angustia, estrés, etc., tanto para los enfermos y familiares que los acompañan como para médicos y equipos de trabajo en general. Esto es algo que se debe tener muy presente en el diseño, construcción y equipamiento de dichos lugares por lo que aunque no se trate de galerías de arte ni de lujosos hoteles se debe estar atento en el efecto que se logra mediante acabados, colores, materiales, iluminación, mobiliario, decoración, etc.
En pocas palabras no solamente es importante poner especial cuidado en la atención y servicios que se brinden en cualquier institución relacionada con la salud sino también el efecto anímico que se perciba, lo cual se traducirá en una mejor experiencia para pacientes y personal.
Influencia del arte y los espacios agradables en los estados anímicos
Durante mucho tiempo se han realizado estudios sobre la influencia que ejerce un determinado ambiente en el estado anímico de las personas y se ha descubierto que el arte tiene una gran influencia para su tranquilidad y relajación. Esta es la razón de que exista una creciente tendencia a incluirla en clínicas y hospitales, de tal suerte que algunas instituciones poseen importantes colecciones artísticas exhibidas en sus diferentes áreas.
En realidad no es preciso que se trate de colecciones de alto valor o de autores de renombre. En algunos hospitales se han colocado diferentes obras artísticas como pinturas, esculturas y fotografías elaboradas por pacientes, por sus familiares y/o amigos, por donantes o por miembros del staff. Estas obras se han distribuido en muy variadas áreas para que puedan ser apreciadas por quien transite por ellas y los resultados han sido sorprendentemente positivos.
Como parte de los estudios realizados para valorar la influencia que puede ejercer el arte en el ánimo de las personas, en algunos hospitales han sido estratégicamente colocadas diversas obras en áreas como centrales de enfermeras, salas de recuperación, áreas de cuidados intensivos, áreas privadas que son utilizadas para dialogar con los familiares de los pacientes, y donde con mucha frecuencia se ofrecen informaciones sobre estados críticos, fallecimientos, etc., y se ha llegado a la conclusión de que el arte contribuye en gran medida en los procesos de recuperación.
Por otro lado se ha observado que en algunos hospitales, a ciertos enfermos que deben ser trasladados en camas, camillas o con aparatos sumamente voluminosos, o que están en proceso de recuperación por algún tipo de cirugía, maternidad, y otros padecimientos, se les traslada utilizando elevadores que se localizan en áreas de acceso restringido. Esto se hace o se hacía principalmente para no exponer a los pacientes al contacto con el público que viene del exterior y que por consiguiente puede ser portador de gérmenes que en determinado momento ponen al paciente en riesgo de contraer infecciones que compliquen su estado de salud.
Los estudiosos del efecto del ambiente hospitalario en los pacientes descubrieron que al estar dichas zonas ocultas al público con frecuencia son áreas que aunque se apeguen a las normativas de seguridad e higiene, resultan poco agradables a la vista debido a que abundan objetos de uso cotidiano como cajas, aparatos, ductos, cables, tuberías, etc. Este procedimiento indudablemente puede ser muy seguro en cuanto a condiciones de higiene y protección para los pacientes, pero los escenarios no resultan nada agradables a la vista y se llegó a la conclusión de que afectan el ánimo de los pacientes.
Alternativas para el mejoramiento de la apariencia de muros, pasillos y otros espacios
Una vez que se ha demostrado la tan positiva influencia de los espacios agradables surge el problema de presupuesto para lograr una decoración favorable sin que se originen desbalances económicos.
Una alternativa son los diseños murales autoadheribles, que resultan sencillos de colocar y que resisten el aseo del muro, el roce, etc. También existen páneles prefabricados cuyo acabado viene ya con atractivos colores, diseños y texturas, y que además están elaborados apegándose a la normativa hospitalaria oficial en cuanto a facilidades de higiene, materiales retardantes de fuego, antibacterianos, etc.
El diseño arquitectónico también es un factor determinante en el estado anímico de pacientes y personal
Aunque el arte, el colorido y la decoración de los interiores de un hospital son importantes no son los únicos factores ambientales que ejercen influencia en las personas. La distribución de áreas así como el estilo arquitectónico general, tanto interior como exterior deben ser tomados en cuenta en lo que se refiere a funcionalidad y seguridad para el trabajo pero también para crear espacios que sean favorables para un estado de ánimo positivo, de confianza, tranquilidad y relajación que propicien una pronta recuperación de los pacientes y un estado positivo en el equipo y en los visitantes.
Un hospital o clínica que tiene un buen diseño, y cuyos acabados y decoraciones ofrecen un ambiente agradable y relajante no solamente va a ofrecer una estancia de mayor calidad para el paciente y sus familiares sino que brinda las condiciones ideales de trabajo para todo el personal permitiendo que tengan un mejor rendimiento, menos desgaste y por consiguiente un ambiente de cordialidad y armonía entre el equipo y los pacientes, lo cual beneficia a todos, pacientes, personal, familiares y otros visitantes.