Para la instalación y operación de las redes de gases medicinales dentro de un hospital, un laboratorio o una clínica existen normativas oficiales y es necesario contar con algunas certificaciones expedidas por firmas y/o personas autorizadas.
En cada país este tipo de normas y certificaciones puede tener un nombre especial, y corresponder a diferentes tipos de institución.
En México se deben seguir las normas oficiales NOM.

Verificación y certificación de redes de gases medicinales
Los lineamientos a seguir y requerimientos a llenar en lo que se refiere a supervisión o aprobación de lo referente a gases médicos, redes de distribución y todo lo relacionado, es establecido por la Secretaría de Salud.
La normativa procede de la “Dirección General de Regulación de los Servicios de Salud” y las disposiciones son publicadas en el Diario Oficial de la Federación.
Por supuesto este tipo de normativas y disposiciones conllevan un intenso trabajo y una gran coordinación de especialistas involucrados que proceden de instituciones tanto públicas como privadas y que por sus conocimientos y experiencia se consideran autoridades en la materia.
¿En qué consiste la certificación de gases medicinales?
Como su nombre lo indica, es obtener un certificado expedido por una firma autorizada, donde se hace constar que después de una meticulosa revisión de materiales e instalaciones, un determinado sistema de gases médicos está en condiciones de funcionar correctamente.
Para extender el certificado de verificación se realiza un proceso de inspección de acuerdo a la normativa oficial vigente.
Este procedimiento, junto con un suministro de gases también en toda regla, ofrece mayores garantías de seguridad tanto en la operación de los sistemas como en cuanto a la seguridad de los procedimientos en los que se emplean los diferentes gases.
¿Cuándo se debe efectuar una verificación para obtener la certificación?
En casi todas partes del mundo es necesario obtener todos los certificados correspondientes antes del arranque de operaciones de las instalaciones.
Pero posteriormente debe haber revisiones periódicas, regularmente anuales, aún cuando no se hayan presentado incidentes que impliquen cambios o reparaciones de los sistemas o en el equipo.
Cuando durante una verificación se encuentre algún detalle indicador de que los estándares no se están cumpliendo, es necesario corregir el o los problemas, e inmediatamente después realizar la inspección para obtener nuevamente un certificado vigente.
Lo mismo sucede cuando se reemplazan partes del sistema, cuando se remodela una red, ya sea que se haga totalmente o por secciones, el sistema debe verificarse según los lineamientos establecidos.
Aspectos que se verifican para extender una certificación
Entre los diferentes aspectos que se verifican y se someten a pruebas destacan los siguientes.
- Sistemas de suministro de gases de uso médico
Esto incluye:- Manifolds
- Volumen
- Bombas y compresores
- Conectores
- Salidas
- válvulas
- Alarmas
- Verificación de conexiones y su respectivo etiquetado
- Pruebas relativas al flujo y a la presión
- Correcta configuración de las redes de tuberías
- Análisis de partículas
Durante una verificación anual de rutina en una institución en operación es decir, para el proceso digámoslo así, del refrendo del certificado, se realizan diferentes pruebas, que por supuesto están debidamente reglamentadas, para tener la completa seguridad de que todos los sistemas de gases médicos y vacío funcionan correctamente, que los ductos o tuberías están en perfecto estado, que las condiciones de almacenamiento son las adecuadas, y muchos otros factores.
Además es necesario comprobar también lo referente al factor seguridad como es el caso de válvulas, manifolds, manómetros, alarmas y todos los elementos que integran el sistema, por insignificantes que parezcan.
Aún cuando se trate de instalaciones en correcto funcionamiento las pruebas deben realizarse con gran meticulosidad, y calcular detalles como presión y regularidad en el flujo.
Esto se puede hacer ya sea mediante métodos tradicionales o bien con innovadores sistemas que permiten detectar problemas de flujo que se pueden generar dadas las condiciones particulares de cada instalación.
Para certificar un quirófano …
Para extender una certificación de gases de una unidad hospitalaria es necesario realizar pruebas por áreas, y en el caso de laboratorios, quirófanos, unidades de cuidados intensivos y algunas otras como parte de una certificación general de la institución.
Toda persona responsable de un área de quirófanos desea tener la seguridad de que estos funcionan de acuerdo a las especificaciones bajo las que fueron diseñados.
Obviamente necesita saber la clase de aire y gases a los que tiene acceso, índices de flujo y renovación de aire no solamente médico sino también ambiental, y algunos otros indicadores que pueden dar la pauta de que algo puede no estar funcionando correctamente.
Mediante series de pruebas de rutina es posible detectar por ejemplo si el reemplazo periódico de filtros es suficiente para que el aire ambiental ofrezca la calidad debida, si existen fugas de algún tipo de gas, si está penetrando aire sin filtrar, de manera imperceptible por alguna parte, y algunas otras irregularidades que pueden derivar en desenlaces no deseados.
En la actualidad existen diversas facilidades para monitorear de forma constante todo lo que se refiere a redes de gases medicinales de tal manera que es posible obtener el mayor provecho en el suministro y uso de los recursos hospitalarios.
Además existen empresas dedicadas específicamente a diseño, asesoría, instalación y mantenimiento de este tipo de recursos, por lo que obtener las certificaciones reglamentarias por lo regular no representa mayor problema, así se trate de sistemas recién instalados o de redes en operación aunque no sean nuevas.