Los estudios han demostrado la relación que existe entre un entorno más limpio para el paciente, menores tasas de infección y menor riesgo de transmisión de enfermedades.
Diferentes tipos de investigaciones han también demostrado que las cortinas de privacidad con propiedades antibacterianas han logrado aumentar la cantidad de tiempo en el que puede darse la primera contaminación en comparación con las cortinas de privacidad estándar, además se ha logrado probar que reducen notablemente la carga bacteriana que puede existir dentro de un determinado cubículo hospitalario.
Este tipo de cortinas antibacterianas hospitalarias pasan a desempeñar entonces un papel de suma importancia en la búsqueda por evitar la contaminación por microorganismos en los pacientes que se encuentran hospitalizados, siendo este uno de los principales problemas que pueden llevar a una complicación médica.
Este aliado hospitalario juega un papel muy importante para lograr mejorar la higiene ambiental que se respira dentro del ambiente hospitalario.
Usos
Las cortinas antibacterianas son utilizadas básicamente para poder separar los espacios que existen entre las camas de los pacientes que se encuentran hospitalizados para de esta manera lograr brindarles privacidad.
Pueden se usadas en clínicas médicas, salones de emergencias, salas de consulta médica, en clínicas de fisioterapia y en cualquier habitación o lugar en donde se necesite realizar una sectorización con el objetivo de lograr brindarle al paciente intimidad y al mismo tiempo comodidad.
¿Qué deben contener las cortinas antibacterianas?
Muchas empresas en la actualidad fabrican este tipo de cortinas, pero uno de los aspectos más importantes que las cortinas deben de tener es un agente antimicrobiano, el cual debe de ser incorporado en las fibras que forman las cortinas para de esta manera poder producir radicales de hidroxilo, una especie de sustancia química que tienen la capacidad de atacar a los diferentes tipos de microorganismos degradando su biopelícula protectora de la célula, haciendo que la membrana celular del microorganismo se rompa y produciendo la interrupción de todos los procesos biológicos que se dan dentro de la célula, eliminando de esta manera al patógeno.
Otro de los componentes claves es que las fibras que conforman este tipo de cortinas, que deben de ser sintéticas principalmente, tengan la capacidad de convertirse en un agente de integración por medio del cual la cortina tenga la capacidad de fundir y destruir las bacterias. Este importante proceso debe de ser incorporado durante la fase de fusión de los materiales que conforman las cortinas de manera que el agente encargado de matar los microorganismos se pueda distribuir de manera uniforme a lo largo de toda la superficie de las mismas.
6 características que deben tener las cortinas antibacterianas
- Deben ser fabricadas con tejido de polipropileno al 100% y deben de tener la capacidad de ser altamente resistentes para así garantizar la calidad y la privacidad del paciente. Es importante que cuenten con las pruebas necesarias antes de su uso con retardante de llama y deben además de cumplir con las normas internacionales de seguridad.
- Deben de fabricarse con tratamiento antibacteriano, ser ligeras y pesar menos de 1 kg. El ancho debe ser igual al riel de donde la cortina estará colgando, tomando en cuenta los pliegues de la misma. Su altura generalmente es igual a la que va del piso al cielo raso tomando en cuenta el espacio entre la cortina y el piso que es generalmente de 30 a 40 centímetros.
- Deben de ser compatible con la mayoría de los rieles de cortina, su instalación debe de ser sencilla y al igual que su remoción. Algunas cortinas pueden llegar a presentar en la parte superior una maya, la cual mide alrededor de los 50 centímetros como medida estándar.
- Son cortinas elaboradas con material 100% reciclable, no tienen olor y esto implica además un refuerzo en la seguridad de las mismas.
- No producen y ni general ningún tipo de carga electrostática evitando las posibles interferencias con los equipos médicos de las habitaciones hospitalarias.
- Son resistentes a las manchas de sangre, grasa y químicos que no sean corrosivos, de manera que su limpieza se vuelve también más fácil para el personal encargado.
Instalación de las cortinas
Este tipo de cortina debe de ser instalado siguiendo las instrucciones que haya determinado el fabricante y lo ideal es que el proceso sea realizado por personal altamente calificado, utilizando los accesorios y elementos necesarios para una adecuada instalación.
Generalmente, los rieles donde se coloca la cortina deben ser ubicada en el cielo raso en donde se colocan también los tornillos. El riel se fija de forma directa en la parte baja de la losa utilizando tornillos indicados por el fabricante, o directamente en el cielo de gypsum con el material indicado.
Los rieles deben ser colocados con los soportes respectivos y los accesorios de montaje del riel que incluyen tapas, terminales, conectores, soportes de pared y otros elementos que hayan sido fabricados para su uso. Los ganchos de las cortinas deben de ubicarse a 10 centímetros a lo largo de toda la cortina y luego, se colocarán las cortinas en los rieles que corresponda.
Fuente:
www.cleanroomtechnology.com