Para llegar al laboratorio de alta seguridad donde se estudian patógenos letales como el virus de Ébola y Marburg, los investigadores deben deslizar su tarjeta de acceso en la única entrada del edificio, que está vigilado las 24/7 por la policía del estado.
Mientras caminan por los pasillos, más de 100 cámaras de circuito cerrado los observan y más de 3 puertas selladas se interponen entre ellos y su destino; entrar en el espacio final de trabajo requiere de otro golpe de tarjeta y para los laboratorios que albergan microbios especialmente peligrosos una exploración de huellas dactilares nunca está de más.
Para evitar que los virus mortales escapen, cada laboratorio utiliza el flujo de aire negativo y sistemas de escape especializados, para probar su seguridad algunos recintos de investigación realizan simulacros de posibles intrusos y que hacer en caso que algunos de los elementos salga del laboratorio.

laboratorios de alta seguridad ¿Qué tan seguros son realmente?
Es necesario mirar un poco mas allá y no sola aplicar las precauciones obligatorias de ley, porque las consecuencias se reflejarán en el bienestar de los seres vivos más cercanos no solo en los humanos.
Diferentes especialistas exclaman que en muchos países solo una cerradura para la puerta es el único requisito especificado, pero esta no basta para que la seguridad sea de calidad, pueden incluirse otros elementos para el sistema de protección con guardias, tarjetas de bio-identidad y vigilancia en video, claramente son sumamente costosas pero resguardan la salud de sus empleamos y ciudades cercanas.
Los riesgos no solo involucran que se escape alguno de los virus o microbios, sino sufrir ataques de bioterrorismo que tienen fines mucho más negativos sobre la sociedad, cuando se realiza el diseño y presupuesto se deben tomar en cuenta miles de variables para hacer un proyecto sólido, fiable y con capacidades de adaptabilidad en un futuro.
Debemos tener presente que la ciencia avanza día tras día y el hecho de adaptarnos a ella se hace cada vez más real, así que la mayoría de proyectos deben contar con planes de remodelación cuando ni siquiera están construidos de esta forma el ahorro de energía, tiempo y recursos se reduce a cifras asombrosas.
Las agentes que se estudian y pueden ser contagiados por vía área, tacto, fluidos y sobre todo entre mamíferos presentan un alto índice de bioseguridad en los laboratorios, porque la raza humana está más expuesta a sufrir sus consecuencias en caso de contagio, sin mencionar aquellos donde la mayoría de antídotos son rechazados por el virus o peor aun no se conoce aun que elemento contrarresta sus efectos a nivel orgánico.
Alguno de los medios de barrera para los trabajadores de laboratorios de alta seguridad son el uso de monos desechables, respiradores monitorizados, guantes dobles además de cubiertas para zapatos; cada vez que los científicos salen del espacio de trabajo deben quitarse los equipos de protección y ducharse antes de ponerse la ropa que usaran para ir a casa y anda en la calle.
¿Qué tan seguros son estos laboratorios?
La mayoría de la población a nivel mundial es lo que se pregunta , ya que muchos no tienen planes de emergencia para una amplia variedad de amenazas y algunos no saben el alcance real que podría tener el contagio de estos virus, según diversos estudios en la década anterior de USA se dieron al menos 400 accidentes en laboratorios de alta seguridad y la población no se entero ni siquiera de la mitad.
A nivel mundial recientemente se han construido o están en construcción miles de laboratorios en Bangladesh, India, Indonesia, China, Brasil y México entre otros, sin embargo muchos países tienen poca o ninguna regulación y debe tomarse con mucha seriedad su apertura y funcionamiento, porque en pocas palabras se estarían propagando la proliferación sin restricciones de los microbios más peligrosos a nivel mundial.
Los laboratorios públicos y los privados siguen normas y formatos de ejecución totalmente diferente, pero al final ambos deben cumplir con las normas mínimas de bioseguridad del espacio y futuros empleados.
En algunos países se encargan de verificar los antecedentes de todos los miembros del personal, requieren huellas dactilares de las personas que tendrán acceso a las áreas de mayor restricción, hacen uso de infrarrojos para detectar intrusos y pocas personas conocen el código de los congeladores que contienen los virus, en algunos casos llegando a cambiar la contraseña en fechas determinadas.
Algunas personas piensan que es algo exagerado y una pérdida total de dinero pero realmente estos agentes pueden convertirse en armas biológicas en pocos segundos, por esta razón es el tiempo, recursos y dinero que se invierte en mantener los laboratorios de alta seguridad realmente seguros.
Al escuchar de infrarrojos y cámaras de vigilancia muchos latinoamericanos pensamos que estas actividades no se dan en nuestros países, y la verdad es que poco a poco los gobiernos de diferentes países están invirtiendo en estas áreas y tenemos que ser pacientes para ver los resultados a futuro a nivel de salud, medicina y bienestar de nuestra población: es importante también que la población esté informada de todos los riesgos y que comprendan realmente este tipo de instalaciones cerca de nuestros hogares, montañas y playas.