Todos sabemos que en la actualidad cualquier tipo de edificación debe cumplir con ciertas características de acuerdo a normativas, dependiendo del uso al que se va a destinar.
También sabemos que planos y materiales deben responder a dichas necesidades, y contemplar por supuesto lo que a seguridad se refiere, todo lo cual abarca muy variados aspectos.
En el caso de clínicas, hospitales y otros establecimientos relacionados con la atención y el cuidado de los pacientes, en todas partes del mundo se tienen normativas muy específicas, y las autoridades están siempre al pendiente de que estas se cumplan.
Las inspecciones de redes de suministro de gases médicos sirven para detectar cualquier tipo de irregularidad que pueda implicar alguna clase de riesgo.
Estas verificaciones deben efectuarse periódicamente para garantizar el buen funcionamiento, y por supuesto para evitar cualquier complicación en caso de alguna inspección oficial.
Las disposiciones oficiales respecto a las características que deben tener las redes de suministro de gases médicos son del todo comprensibles ya que está en juego la seguridad de muchísimas personas, no solamente los pacientes, que puede decirse que es en este caso el grupo más vulnerable debido a su condición de enfermedad; y su integridad física depende totalmente de la institución.
Pero también está la seguridad del personal, visitantes, proveedores, y de la comunidad en general.
La ética profesional debiera ser suficiente para que en cualquier institución de tipo hospitalario, absolutamente todas y cada una de sus instalaciones estén siempre en óptimas condiciones.
Pero en la práctica sabemos que no siempre es así.
Por ello es frecuente que se realicen inspecciones oficiales de verificación.
Generación de gases médicos
En una institución de tipo hospitalario los gases pueden ser generados in situ o bien puede contratarse algún proveedor certificado que los suministre.
Esto en lo que se refiere a oxígeno y nitrógeno, pero el aire comprimido y el vacío, que también tienen importantes aplicaciones en el medio hospitalario, se generan mediante compresores y bombas.
En una palabra, no se trata de simplemente una red de suministro sino primordialmente de tres, que son oxígeno, aire y vacío.
Como ya se mencionó, el oxígeno o se genera en planta propia o se adquiere embotellado en cilindros de diferentes capacidades.
El vacío se suministra mediante sistemas o aparatos generadores de presión negativa, que es la que produce la succión que se emplea en diferentes proceso hospitalarios, como es el caso del vacío quirúrgico.
El aire utilizado en las redes de gases es aire tomado de la atmósfera pero antes de enviarse a la red de distribución se somete a un proceso de filtración y depuración que garantice su pureza.
La red de gases medicinales
Se puede decir que el elemento central de una red de gases medicinales son las tuberías, por donde se conducen los gases a presiones determinadas y que deben garantizar que llegan a las tomas de consumo con la misma calidad con la que han sido generados.
Las tuberías deben ofrecer características específicas y estar protegidas contra la corrosión, las temperaturas extremas.
Además cada tubería y sus ramales respectivos deben poder identificarse perfectamente en cualquier punto, y diferenciar sin la más mínima posibilidad de confusión, el tipo de gas que transporta y la dirección de flujo.
Se considera que la identificación de las diferentes tuberías debe colocarse cuando menos cada 6 metros, para evitar confusiones.
Para ello se deben utilizar siempre los símbolos y colores establecidos para cada uno en las normas internacionales:
- Oxígeno Verde
- Aire Amarillo
- Vacío Blanco
- Óxido Nitroso Azul
- Evacuación de gases Violeta
Cada tramo de la red debe contemplar que en ningún momento y bajo ninguna circunstancia exista posibilidad de contacto con ningún tipo de aceite.
Un punto de suma importancia es también bajo ninguna circunstancia se empleen las tuberías de la red de suministro de gases médicos como conexión a tierra.
Los aparatos y herramientas para cortar las tuberías al momento de instalar o efectuar reparaciones, deben ser de tal calidad y características que no deformen el tubo y que por ninguna razón desprendan ningún tipo de partícula o rebaba que pueda introducirse en la red, por mínima que sea.
Recomendaciones importantes
Es de vital importancia cerciorarse de que el personal que va a realizar la instalación de las redes de distribución esté debidamente acreditado como especialista y que efectúe los procedimientos necesarios para instalar correctamente la red.
Los tramos de tubo así como conectores y otros accesorios deben ser correctamente lavados con productos especialmente diseñados para este fin, y deben quedar tapados para evitar que se contaminen mientras son instalados.
Para las uniones que requieren soldadura debe tenerse la precaución de no utilizar fundentes con alcohol y bórax mezclados.
En cuanto a los soportes de las tuberías, deben colocarse cuidadosamente de tal forma que la tubería quede aislada del soporte con materiales anticorrosivos como plástico o neopreno.
Sobra decir que deben ser los adecuados para soportar la carga de la tubería. Además debe considerarse que la separación entre los soportes debe responder a diámetro, posición y longitud de la tubería.
Seguridad
Para mayor seguridad en la operación y manejo de las redes de suministro de gases médicos son vitales las válvulas, que deben estar siempre en óptimas condiciones.
Por otro lado también es de suma importancia la accesibilidad de las válvulas o llaves de piso, para que en caso necesario se interrumpa el flujo de gases sin mayor problema, pero con la precaución de mantener esto fuera del alcance del público y/o personal no autorizado.
Lo mismo aplica para las alarmas.
Las revisiones y controles preventivos pueden reducir de manera importante las contingencias en el funcionamiento de las redes de suministro de los gases médicos.